Somos una Iglesia Apostolica conforme Efecios 2:20 con la misión de predicar el Evangelio para salvación en el Nombre de Jesucristo a todos los necesitados de Dios en sus vidas.
Buscando alcanzar nuestras localidades, ciudades, regiones buscando llegar a las comunidades cercanas o lejanas cruzando fronteras y hasta donde nos sea posible llegar con la ayuda de Dios.

Uniéndonos con aquellos obreros que son pregoneros del Nombre de Jesucristo y que tengan esta misma misión de predicar el arrepentimiento y el perdón de pecados en el nombre de Jesús.

Jesús da mandamiento, no lo deja como una opción.
Él dijo: “Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día; y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén”.

Por esa razón es más urgente en nuestros días de seguir con esa misión de hacer llegar este mensaje a todos aquellos que están cansados y cargados de todo lo que van arrastrando en este mundo y al hacer caso a este llamado Cristo la quita toda carga de pecado y de muerte y los hace descansar esto es al creer en Cristo Jesús.

Pues la Escritura dice: “Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado. porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo”.

¡Esto nos compromete más a cumplir con nuestra misión para que muchos alcancen la salvación! Pero las preguntas que nos deja el apóstol Pablo nos estremecen.
¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique?
¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!

Es por eso que recordando y estimulando a cada creyente cerca de nuestros para hacer esta misión posible marcando la diferencia y que por todos lados que vallamos quede una marca de nuestros trabajos en su obra del Señor Jesús.
Y que los hogares de cada familia cristiana ya existentes y de las familias que han de llegar al conocimiento de Cristo se unan a esta misión y que sus
CASAS SEAN CENTROS DE INSTRUCCION Y LUGARES DE SALVACION.

Nuestra misión es firme y pedimos diariamente a nuestro Dios por sus fuerzas para in cumpliendo con esta grade y sublime MISION, en el Nombre de Jesús.